El pasado del Empordà
Una mirada atrás
Aparte de la bebida de uva, las calas rocosas, la tramontana, los buñuelos y el surrealismo, el Empordà es el primer enclave de la península ibérica donde se asentaron los griegos y los romanos.
Las civilizaciones llegaron a "Emporion", el actual municipio de San Martí de Empúries que aún conserva su denominación, y nomenclatura que pusieron de una palabra de significa "mercado" o "lugar donde se practica el comercio" en griego. Los mismos griegos pondrán más tarde el nombre de la península ibérica, extraído del Íbero, el segundo río más caudaloso de la península, que actualmente toma el nombre de Ebro.
En este punto estratégico del mediterráneo, en el extremo sur de la actual golf de Roses, hoy se conservan, entre tantas otras, restos arquitectónicos de culturas de las que hemos bebido dentro de un recinto visitable a las ruinas de Empúries, un lugar donde su visita es merecida más allá de su belleza física e historiográfico incontestable.
